LIMPIEZA DE LOS VEHÍCULOS AGRÍCOLAS
Los principales aliados de un agricultor son sus vehículos agrícolas, por tanto, cada agricultor sabe cuánto es importante la limpieza para reducir averías y mal funcionamientos y evitar costes de reparación elevados.
Además, el mantenimiento de los equipos también es garantía de eficiencia y seguridad en el trabajo, aunque conlleva una gran inversión en términos de tiempo.
Por eso es muy ventajoso utilizar una hidrolavadora, para tener siempre limpios los vehículos que se utilizan en los campos, los vehículos que se utilizan para el transporte de fruta y vegetales y para eliminar barro y tierra de patios y canales de drenaje.
Asimismo, lanzas y boquillas de alta precisión permiten eliminar la suciedad que también se infiltra en los espacios más pequeños, permitiendo guardar las herramientas de temporada perfectamente limpias, sin correr el riesgo de que los residuos corroan o estropeen los materiales a largo plazo.
HIDROLAVADORAS PARA LA GANADERÍA
Un ganadero transcurre gran parte del día limpiando recintos y corrales para el ganado de los excrementos y del estiércol, dado que en cualquier ganadería es fundamental evitar la proliferación de bacterias, gérmenes y parásitos.
Por eso, una hidrolavadora es óptima para:
- limpiar de manera rápida y fácil los comederos de ovejas, cabras o caballos de los residuos, antes de volverlos a llenar;
- limpiar los establos de los cerdos del estiércol y del barro que dispersan después de escarbar al aire libre;
- liberar los pasillos de recogida de los grandes establos para los bovinos de líquidos residuales, paja y excrementos;
- desinfectar las incubadoras para los pollitos y los ambientes para las incubación de los huevos en las ganaderías avícolas.
HIDROLAVADORAS PARA LOS VITICULTORES
La limpieza también es indispensable para las empresas vinícolas: solo un chorro de alta presión puede alcanzar los residuos de orujo y los restos de una vinificación anterior que se acumulan en barriles, barricas e instalaciones.
Es fácil imaginar que sucedería al delicado proceso de fermentación si no se eliminaran materiales residuales o contaminantes; no es admisible arriesgarse a estropear una larga elaboración debido a una limpieza poco esmerada.
Existen hidrolavadoras semi-profesionales aptas a una pequeña bodega e hidrolavadoras profesionales para las empresas vitivinícolas de grandes dimensiones.
HIDROLAVADORAS Y GENERADORES DE VAPOR PARA EL SECTOR LÁCTEO-QUESERO
En cuanto a los laboratorios para la producción láctea-quesera, los locales en los que se recoge y elabora la leche, deben cumplir con altos niveles de higiene para mantener una óptima calidad del producto y para ofrecer una garantía de seguridad a los consumidores. En estos casos, se pueden utilizar hidrolavadoras eléctricas de agua fría alimentadas con agua caliente a 60°; estos productos, como la K STEEL XL TS, llevan juntas especiales para el agua caliente que permiten limpiar y desinfectar esmeradamente todos los locales de trabajo.
Además de las hidrolavadoras, también es muy recomendable utilizar generadores de vapor, que debido a la emisión de vapor saturado de hasta 10 bar a una temperatura de 180°C, permiten disolver la suciedad de manera eficaz. Los generadores de vapor también permiten ahorrar agua hasta un 90% con respecto a los sistemas tradicionales de alta presión, y además generan residuos mínimos al finalizar la limpieza. Esto significa un notable ahorro económico y ecológico.
CUIDADO DEL SUELO PARA LOS ALMACENES DE MADURACIÓN
También los almacenes de maduración de los quesos deben cumplir con altos estándares de limpieza. No solo en los estantes donde se apoyan las piezas de queso, sino también en los suelos. Además de polvo y suciedad, también hay residuos alimentarios que podrían favorecer el desarrollo de las bacterias. Los principales instrumentos para la limpieza de estos locales son los productos para el Cuidado del Suelo, como barredoras y fregadoras-secadoras de suelos. Las primeras permiten eliminar el polvo y la suciedad gruesa de la superficie, también en los espacios exteriores del almacén, mientras las segundas actúan posteriormente para limpiar y desinfectar. Estas máquinas garantizan enseguida unos suelos secos y seguros, evitando de este modo que las áreas por limpiar permanezcan cerradas largamente o que alguien pueda resbalar sobre residuos de agua.
